Aurora Guerra profesora conferenciante extranjera invitada al Congreso de la Sociedad Dominicana de Dermatología
En la conferencia se trato de la dismorfofia o trastornos dismórfico corporal que se define como la preocupación excesiva por un defecto corporal inexistente o de escasa entidad, que se relaciona con una alteración de la imagen corporal. La imagen corporal es la representación del propio cuerpo que cada persona construye en su mente, y continúa construyéndose a lo largo de la vida adaptándose a los cambios biológicos tales como la pubertad, el embarazo, la menopausia o la vejez. Se da con mayor intensidad en relación a la piel de la cara, el cabello, el vello y las uñas. Puede ser de contenido delirante (ideas falsas resistentes a la argumentación lógica) o no delirante, aunque ambas responden por igual a los tratamientos farmacológicos y psicológicos. Entre los factores predisponentes se encuentran la timidez, la tendencia perfeccionista, los traumas infantiles debidos a burlas sobre el aspecto físico, la competitividad con hermanos, la obesidad, y los abusos sexuales en la infancia o adolescencia. Sin embargo, el factor más favorecedor de la forma cutánea es el padecimiento de una alteración previa de la piel. El dermatólogo es el médico más consultado por estos pacientes. Un 46% de ellos acuden a consultas, y un 38% reciben tratamiento de estos especialistas.